El empoderamiento femenino: ”Soy mi propia jefa”

Cuando hablamos de emprendimiento nos referimos a la forma más perfecta de tomar las riendas de nuestra vida. Sin jefes, horarios restringidos, tanto si exploras fórmulas para ganar dinero desde casa como si deseas crear un punto físico, las emprendedoras son las principales alentadoras por disponer de su propia creación y labor ya sea en la rama de la cosmética, medicina, gastronomía, etc. y con las herramientas propias, que le permiten acomodar el entorno a su antojo, hacer de cada obstáculo un triunfo que permita un mundo mejor donde vayan de la mano, creatividad, talento y belleza.

Por Jabiela Reguera

Al emprendimiento que conceptuamos tradicionalmente como “comenzar, iniciar, arrancar, abrir, promover”, se le suma la innovación femenina y juntos, en paralelo, logran soluciones para grandes problemas, ofrecen novedosas ofertas, empoderan a la mujer, resalta el papel de esta y con esto logran un cambio social.

No se puede poner en duda que el emprendimiento femenino se abre camino cada vez más observándose como un fenómeno a nivel mundial.  En nuestro país, una mayor cantidad de féminas inician un negocio propio, ello es símbolo de transformación que las hace poderosas porque se convierten en fuentes de superación, de ganancias, de economía sustentable y la sociedad se beneficia de estos logros femeninos pues la creación cada vez mayor de las mujeres, nutre a la familia como microsistema, pero también al país como macrosistema.

Teniendo en cuenta todo lo positivo del quehacer de las mujeres desde el punto de vista económico y social, se impone respaldar sus emprendimientos de desarrollo, contar con políticas que apoyen su crecimiento, darles la oportunidad de ubicarlas donde sus logros les permitan llegar. No podemos olvidar un planteamiento reciente de la ONU que dice: “El futuro de la economía global será liderado por las mujeres”.

Un Gustito

@ungustito.cl se encuentra en Instagram, un emprendimiento dedicado al catering de eventos, predominando los postres: tiramisú, tres leches, merengue berries, suspiro limeño, entre otras delicias más. Siendo las festividades, las fechas donde suelen ser mayores los encargo e ingresos. Su creadora, María Jesús Fuentes, una joven de 22 años que durante el 2019 congeló su carrera universitaria y se embarcó en un nuevo viaje hacia la repostería, siendo la oficina de su madre el punto de partida: “las compañeras de mi mamá solían pedirme los postres familiares, entonces dije, esto lo tengo que formalizar de una u otra manera”, relata.  

Johanna Olivares Joyas

Johanna Olivares, o más bien @Johannaolivares_joyas, una mujer de 47 años a la que siempre le apasionó trabajar con las manos y crear. En la búsqueda de hacer algo que se complementara con su trabajo de tiempo completo: ser mamá, también fue de a poco un nuevo reto. “Mi motivación es crear piezas lindas, las joyas siempre han sido parte de vida, mi mamá siempre nos compraba joyas y es algo que puede cambiar una tenida. Me encantan las piedras y hacer combinaciones con ellas”, explica. En su trabajo ve puras ventajas: “cuando haces algo que amas y a tus clientas les gusta es aún mejor, es como una conexión que tienes con ellas”, añade.

Med Suq

@medsuq , Librería y Bazar de Medicina, el negocio de Catalina Lalanne Zubieta de 36 años. Quien luego de trabajar un tiempo en una editorial de medicina, decidió junto a su mejor amiga quien también laboró en una librería médica, sacar lo mejor de ambas experiencias y crear juntas un emprendimiento. “Debido al estallido social y pandemia decidimos independizarnos con una librería propia, gracias al apoyo y confianza en nuestro proyecto de parte de las más prestigiosas editoriales médicas en Chile y en el extranjero, fue qué emprendimos”, cuenta. Sintiéndose orgullosa de poder aportar a la sociedad, tener su propia empresa y realizarse como profesional.

Zapp Shoes

Paula Noguera Salinas de 20 años, quien tiene un emprendimiento @zapp__shoes en el cual vende réplicas de zapatillas Jordan y Nike, contando con infinidades de modelos, recuerda que todo surgió producto del aburrimiento en pandemia y el deseo que compartía con una amiga de tener algún negocio. “Con mi amiga nos queríamos ir de viaje a Europa así que empezamos a vender las zapatillas, estaba muy de moda. Mis zapatillas son de caña alta, de colores. Eso llama mucho la atención”, afirma.  Aunque le ha ido muy bien económicamente, siente que la mayor ventaja ha sido convertirse en una persona más ordenada, organizar espacios y tiempos adecuados son lo principal para llevar a cabo su emprendimiento responsablemente. 

Karité / Cosmética Natural

Madeleine Campos Saez, de 36 años quien está a la cabeza de Karité/Cosmética Natural, @valicosmetica. Decidió emprender por la necesidad de generar dinero para poder mantener a su familia, pues estaba desempleada. “Me motivo la falta de emprendimientos de este rubro y dar a conocer los beneficios de la cosmética natural. Llevo 11 años elaborando para mi consumo”, expresa. Muchos son los beneficios para la piel y el medio ambiente, pues la mayoría de los insumos son biodegradables.

ArTejido

“Mi emprendimiento es de tejido, se llama ArTejido . Consiste en confección de prendas tejidas a mano con distintas técnicas y materiales”, comparte. Inició este emprendimiento porque necesitaba algo que le permitiera ganar dinero sin tener que cumplir con un horario. Mamá de cuatro hijos, uno de ellos de 10 años que aún necesita de su compañía. “La verdad tejer me relaja mucho y cada pieza que confecciono es una obra de arte, ya que involucra esfuerzo, tiempo, dedicación y mucho amor. Empecé cuando estaba en la universidad estudiando. Tejía mis propios chalecos y a la gente le gustaba mucho y me comenzó a pedir que les vendiera mis tejidos”, finaliza.

Tal vez algunas emprendedoras tengan como objetivo acercar a las personas o conformar ideas y prácticas revolucionarias que estimulen a la sociedad. Eso sí, tienen algo en común, se lanzan a la acción convirtiéndose en las líderes del mañana.